Dr. Bartolomé de la Fuente: “La COVID-19 no es la única culpable de los problemas de salud mental de los profesionales sanitarios”
En los últimos años se ha ido incrementando el número de casos vinculados a trastornos adaptativos y reactivos con claras vinculaciones a conflictos en el lugar de trabajo de los profesionales sanitarios, y, en concreto, de los médicos. Para el Dr. Bartolomé de la Fuente, coordinador del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) en Andalucía, “la COVID-19 no es la única culpable de los problemas de salud mental de los profesionales sanitarios”
Madrid medicosypacientes.com/ Sara Guardón
El Dr. de la Fuente participa en el IX Congreso Nacional del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) y III Encuentro Latinoamericano.
Esta novena edición del Congreso Nacional del PAIME tendrá lugar en Cádiz los días 4 y 5 de noviembre para abordar los principales retos en salud mental de la profesión médica. Este evento es organizado por la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) junto al Colegio de Médicos de Cádiz bajo el lema “Cuidando de ti, cuidando de todos”.
- ¿Considera que la pandemia de COVID-19 ha puesto en relieve la necesidad del programa PAIME?
El PAIME es un programa necesario de por sí, habiendo demostrado su eficiencia, pero si es verdad que la Pandemia COVID ha evidenciado aún más la vulnerabilidad a la que estamos expuestos los profesionales sanitarios, y la necesidad de cuidar factores generadores de estrés adicional que puede provocar y favorecer enfermedades mentales y adicciones.
- ¿Se ha sabido adaptar a las nuevas necesidades y situación originada por la crisis sanitaria?
Desde el primer momento de la pandemia los profesionales de los Programas PAIME han tomado conciencia y reaccionado dando un paso hacia delante, de forma independiente al propio Programa PAIME, ofreciendo apoyo emocional a los médicos que estuvieran pasando por momentos duros. Se crearon en muchos colegios Programas de apoyo psicológico de ayuda Covid, al detectar que se estaban produciendo cambios en la sociedad en general y en el sistema sanitario en particular, con problemas de salud mental emergentes, sobre todo emocionales, de estrés y de incertidumbre ante la nueva situación, adecuando sistemas de apoyo, y adaptándonos a las necesidades, promoviendo la integración de los médicos que se han visto afectados de una u otra forma por la Covid-19.
También desde la Fundación Galatea, con el impulso de la Fundación “La Caixa”, el Ministerio de Sanidad y la colaboración del Consejo General de Colegios de Médicos, el Consejo General de la Psicología y el Consejo General de la Enfermería, se implantó a nivel nacional un servicio telefónico de acompañamiento psicológico para profesionales del ámbito sanitario durante el brote de Covid-19 para ayudar a gestionar el estrés, el agotamiento, el miedo al contagio propio o de sus allegados y las situaciones de sufrimiento.
Durante la pandemia se ha evidenciado que la telemedicina es un instrumento clave de presente y de futuro para la atención especializada de los médicos enfermos, facilitando en muchas situaciones el seguimiento de casos.
- ¿Cuáles son los mayores retos de financiación que tiene el PAIME?
El PAIME es un programa gestionado por los Colegios de Médicos, impulsado desde el Consejo General, que precisa una infraestructura adecuada, con equipos profesionales muy especializados, lo que supone un coste económico.
La administración debe ser consciente del esfuerzo de los colegios por mantener el PAIME, tan importante en la garantía de la praxis médica, ya que un médico tiene una responsabilidad para con terceros, los pacientes, y el problema que se genera va más allá de ser un tema individual, profesional y corporativo para convertirse en un problema de salud pública, y por tanto debe colaborar mediante convenios para su mantenimiento, tanto económico como de coordinación, para lo que además debería ejecutar normativas que regulen el PAIME y faciliten su funcionamiento y financiación.
No obstante también los Colegios deben realizar actualmente un esfuerzo en sus presupuestos y velar porque el programa pueda desarrollarse de forma adecuada. La Fundación de la OMC apoya, además de unificando criterios a través del Comité Técnico Nacional PAIME, en la subvención de los ingresos en las clínicas concertadas y en la organización de actividades como son las Jornadas Clínicas PAIME y los Congresos Nacionales PAIME. Uno de los retos es que estén financiados todos los PAIMEs y que haya la mayor igualdad en la atención y financiación en todos los colegios.
La rentabilidad de todo lo que se invierta en el PAIME está garantizada, pues desde su puesta en funcionamiento hace más de 20 años se han atendido más de 5000 profesionales, con una tasa de recuperación superior al 80% de los casos, lo que supone un instrumento de control de la praxis médica y de garantía para la población a la que se atiende.
- La pandemia, ¿podría ser un punto de inflexión para sensibilizar a las Administraciones Públicas de que el objetivo del programa no solo es mejorar la salud del médico, sino también la calidad de los servicios sanitarios y, sobre todo, proteger la salud de los ciudadanos?
Como hemos comentado antes, la pandemia ha puesto en valor lo importante que es el cuidar al cuidador, y que tenemos que velar porque los médicos estén en condiciones adecuadas para atender la salud de los ciudadanos.
La administración debe ser consciente de ello, tanto a nivel asistencial como preventivo, y corresponde a las Autoridades Gubernamentales, además de la ayuda económica, modificar aspectos estructurales del funcionamiento del Sistema de Salud para que el personal sanitario pueda soportar, sin acabar haciendo psicopatología, el duro trabajo al que está sometido.
- ¿Qué apoyo recibe el PAIME desde la Junta de Andalucía?
Desde año 2008 existe un convenio de colaboración entre el Consejo Andaluz de Médicos y la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, para la asistencia médica y psicológica, actividades de ayuda a la difusión del programa, actividades formativas y de coordinación, que durante los primeros años solo era para la atención de médicos con adicciones, si bien desde los colegios se atendía también todas las patologías psiquiátricas, y los convenios tenían un importe económico de 52000 euros/año, pero que ya en el año 2018 se renovó incluyéndose también la asistencia para médicos con patología de salud mental y se incrementó el presupuesto a 75000 euros/año. Siempre ha existido una buena relación con la Consejería, que además de económica facilita la colaboración en la reinserción laboral.
- ¿Cómo funciona la Red PAIME en esta Comunidad Autónoma?
En cada colegio hay un responsable PAIME colegial, que suele ser el secretario, o como en el caso de Córdoba un coordinador nombrado por la Junta Directiva, y tienen sus profesionales PAIME, médicos y psicólogos y en algunos de ellos existe una Unidad Clínica, que realizan la atención de casos. El acceso se suele producir de forma ágil a través de un teléfono colegial. A nivel autonómico hay un coordinador nombrado por el Consejo Andaluz como responsable de organizar, unificar criterios y la realización de memorias anuales.
- ¿Cuáles son los trastornos y problemas de salud mental que ha desencadenado la pandemia en los profesionales?
La pandemia ha generado sobre todo una sobrecarga emocional y asistencial con gran incertidumbre, y ello favorece que se puedan producir mayor patología, como trastornos adaptativos, de ansiedad, depresivos, burnout y adicciones.
Pero debemos tener en cuenta que la Covid-19 no es la única culpable de los problemas de salud de los profesionales sanitarios. En los últimos años se ha ido incrementando el número de casos vinculados a trastornos adaptativos y reactivos con claras vinculaciones a conflictos en el lugar de trabajo, bien sea con la organización, con el equipo o con la función.
- ¿Por qué es importante la celebración del Congreso en un año como este?
Los Congresos siempre son trascendentes a la hora de tener la oportunidad de reunirse las Juntas Directivas de los Colegios y los profesionales clínicos analizando y exponiendo la situación en la que se encuentra el programa PAIME tratando los temas de mayor interés, y está claro que en este año tan especial marcado por la pandemia del coronavirus, y todos los cambios que han supuesto en nuestro trabajo y en la población a la que atendemos se enfatice en la búsqueda de soluciones a todos los retos a los nos enfrentamos, y que van a suponer una mayor concienciación sobre la salud del profesional sanitario.
- ¿Qué nuevas líneas de trabajo debería desarrollarse para trabajar en la prevención de los problemas de salud mental de los profesionales?
La prevención es siempre un pilar fundamental de cara a cualquier enfermedad y debemos tomar una mayor conciencia de realizarla, para no llegar a situaciones de mayor gravedad.
Ya en las últimas Jornadas Clínicas PAIME realizadas el año pasado se volvió a incidir en que el cuidado de la Salud Mental del médico debe empezar en las etapas más tempranas de su periodo formativo, en el Grado de Medicina, ya que vamos disponiendo de información sobre los perfiles de estudiantes de medicina y jóvenes profesionales respecto a su sufrimiento emocional y sus limitaciones en cuanto a recursos de afrontamiento y habilidades relacionales. También es una acción u obligación colegial, la intervención de tipo preventivo y formativo con todos los médicos en general y particularmente con los Residentes.
La cartera de Servicios del PAIME se debe definir apostando por incluir los servicios que conlleven a una buena Salud Mental de los médicos, así como los medios necesarios para tratar la Patología Mental de los mismos. El PAIME debe evolucionar adaptándose a las "nuevas necesidades" y es necesario dotar a los terapeutas PAIME de formación, recursos y protocolos adecuados para una gestión de calidad.
Se deben fomentar estudios nacionales y de las distintas Comunidades Autónomas sobre salud, estilos de vida y condiciones de trabajo de los médicos, que nos puedan ayudar a definir los nuevos perfiles que nos vamos a encontrar.