Dr. Diego Villagrán: "Este premio es para mí un enorme orgullo y una gran motivación a seguir trabajando incluso más que antes”
El Dr. Diego Villagrán, con 25 años y graduado en Medicina, con 69 matrículas de honor a lo largo de su carrera, ha recibido hoy el Premio Jesús Galán de 2021 otorgado por la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) a los mejores expedientes de huérfanos de médicos protegidos por la institución. En esta entrevista, para el Colegio de Médicos de Cádiz de donde es colegiado, señala que "este premio es para mí un enorme orgullo y una gran motivación a seguir trabajando incluso más que antes”
Cádiz medicosypacientes.com/ COM Cádiz
Gracias a una excepcional trayectoria académica como atestiguan sus 69 matrículas de honor, el Dr. Diego Villagrán Sancho, colegiado en el Colegio de Médicos de Cádiz en junio de 2021, ha obtenido el premio Jesús Galán que concede la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) al mejor expediente de un huérfano protegido por la Fundación.
Beneficiario de la FPSOMC desde los 20 años e hijo de la médica Cristina Sancho Vázquez, fallecida en 2017, y del también médico colegiado en Cádiz Diego Villagrán Moreno, se encuentra realizando actualmente el primer año como médico residente de Neurología en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla. En la siguiente entrevista, destaca la curiosidad y la disciplina que ha siempre ha estimulado en él su entorno familiar y la empatía y el afán de superación como valores que deben ir siempre unidos al ejercicio de la Medicina, al tiempo que se muestra especialmente agradecido al apoyo recibido por la Fundación y de los colegiados socios protectores a través de ella.
¿Qué significa para ti la concesión de este Premio nacional de la Fundación para la Protección Social de la OMC?
Este Premio es para mí un enorme orgullo. Cuando se me propuso solicitar este reconocimiento apenas se me hizo tangible la posibilidad de realmente ganarlo. Es, sin duda, una gran motivación a seguir trabajando incluso más que antes. Espero poder avanzar en mi carrera profesional tanto como lo he conseguido en la académica.
¿A quién o quiénes dedicas este premio?
Este premio se lo dedico principalmente a mi Madre, Cristina Sancho, que siempre será mi mayor ejemplo a seguir en todos los sentidos, y a mi Padre, Diego Villagrán, por transmitirme su pasión y su curiosidad. Asimismo, se lo dedico a todos esos eternos amigos que han conseguido sacarme de momentos duros con su apoyo y complicidad, con una especial mención a Alba Vidal Ruiz por el apoyo más desinteresado y honesto que he conocido nunca.
Perteneces a una familia de médicos. ¿Cómo has vivido y absorbido de tus progenitores lo que supone la condición de dedicarse a la Medicina?
Aunque nunca se me ha inculcado la idea de dedicarme a la Medicina, desde pequeño me han interesado las ciencias naturales. No creo que fuera un entorno familiar muy marcado por la presencia de la Medicina, pero sí se fomentaba mucho la curiosidad y la disciplina de estudio, recompensando mucho los méritos académicos y respetando la filosofía de trabajo.
¿Cuáles serían los principales valores que debe reunir el ejercicio de la Medicina?
A cada día que paso como Médico Residente voy valorando cada vez más la Empatía y el afán de superación, este último entendiéndolo como la motivación para seguir estudiando y formándote para superarte como médico y poder aportar cada día una atención médica un poco mejor a pacientes que la necesitan.
¿Qué puedes transmitir a los colegiados que no son socios protectores de la Fundación para que se convenza de lo valiosa que sería su aportación?
La verdad es que la Fundación ha supuesto un importante apoyo en circunstancias de inesperada inestabilidad, tanto familiarmente como emocionalmente. Cualquier apoyo cuenta en este tipo de momentos, por lo que me siento especialmente agradecido a los socios protectores y motivo a contribuir a aquellos colegiados que se lo planteen.