Dra. Natividad Laín: “Sin la colaboración de los Sistemas de Salud de cada comunidad autónoma el PAIME no podría financiarse”
La Dra. Natividad Laín Terés, presidenta del Colegio de Médicos de Toledo y del Consejo Autonómico de Colegios Médicos de Castilla-La Mancha, participa en el IX Congreso Nacional del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) y III Encuentro Latinoamericano, para abordar los retos actuales de la financiación del programa. “Sin la colaboración de los Sistemas de Salud de cada comunidad autónoma el PAIME no podría financiarse”, asegura, en esta entrevista, para “MédicosyPacientes”.
Madrid medicosypacientes.com/ Sara Guardón
Esta novena edición del Congreso Nacional del PAIME tendrá lugar en Cádiz los días 4 y 5 de noviembre para abordar los principales retos en salud mental de la profesión médica. Este evento es organizado por la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) junto al Colegio de Médicos de Cádiz bajo el lema “Cuidando de ti, cuidando de todos”.
¿Considera que la pandemia de COVID-19 ha puesto en relieve la necesidad del programa PAIME?
Más que nunca, porque el desgaste físico y mental de los profesionales, el aumento del estrés y las dificultades a las que nos enfrentamos en esta pandemia hacen más necesario cuidar de los que cuidan a los demás. Y no sólo por la salud individual de los profesionales, sino porque todo ello redunda en la calidad asistencial y en la seguridad de nuestros pacientes. Es, por tanto, una obligación de los Colegios Profesionales establecer procedimientos de control que aseguren que los médicos reciban la ayuda pertinente y no representen ningún riesgo para la salud de la población atendida.
¿Se ha sabido adaptar a las nuevas necesidades y situación originada por la crisis sanitaria?
El Programa de Atención Individual al Médico Enfermo, bajo el paraguas de la FPSOMC, nació para atender a médicos que padecen trastornos mentales y/o conductas adictivas al alcohol y/o a otras drogas, incluidos los psicofármacos, rehabilitar al profesional y garantizar que ejerza la práctica en las mejores condiciones posibles. Y ahora, con la pandemia, debe ajustar sus objetivos a velar también por la salud mental de los facultativos en ejercicio que estamos afectados por la presión y las situaciones vividas. Para ello, hay que promover nuevos recursos de apoyo psicosocial para actuar ante estas necesidades.
¿Cuáles son los mayores retos de financiación que tiene el PAIME?
Creo que la colaboración económica de los Sistemas de Salud de cada comunidad autónoma es fundamental, si no es así, el programa no podría financiarse, sobre todo en Colegios con menos recursos.
Tengamos en cuenta, que estamos tratando a nuestros colegiados a un alto nivel, con excelentes resultados, con un mínimo impacto en el trabajo que desarrollan y, por ende, ahorramos costes a la sanidad pública y en un alto porcentaje seguimos manteniendo activos a nuestros profesionales, que hoy en día, son muy difíciles de sustituir. Es decir, el programa tiene una alta eficacia, con unos costes muy aceptables y sería una gran desgracia que no se pudiera implementar por falta de financiación.
Esto, hay que hacérselo valorar a nuestros gestores sanitarios, para implicarlos y agilizar las vías de comunicación en este sentido.
La pandemia, ¿podría ser un punto de inflexión para sensibilizar a las Administraciones Públicas de que el objetivo del programa no solo es mejorar la salud del médico, sino también la calidad de los servicios sanitarios y, sobre todo, proteger la salud de los ciudadanos?
Yo creo que las Administraciones Públicas lo conocen, y lo tienen bastante claro y en ese sentido, colaboran con los Colegios a sostener el programa y facilitar los medios para seguir consolidándolo. Aunque, tal vez, sería deseable una mayor complicidad funcional, más agilidad presupuestaria y también mayor esfuerzo para detectar los problemas y promover respuestas eficaces en este tipo de escenarios inéditos como el que nos ha traído la pandemia del SARS-Cov2.
¿Qué apoyo recibe el Colegio de Médicos por parte de las Administraciones Públicas, o en concreto del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha?
Castilla-La Mancha fue una de las primeras comunidades autónomas que puso en marcha este recurso para los médicos de su servicio de salud a través de un convenio entre el SESCAM y los cinco Colegios de Médicos de la región, que se ha venido renovando, no siempre con la celeridad deseada, la verdad.
Es un acuerdo para el abordaje del médico enfermo cuyo objetivo es su tratamiento y su reinserción social y laboral, garantizando la seguridad en la asistencia que se presta a los pacientes y que también incide en el ámbito de la formación y el asesoramiento para delimitar las conductas de riesgo de los profesionales de la medicina afectados por estas afecciones.
¿Por qué es importante la celebración del Congreso en un año como este?
Todas las citas profesionales que sirvan para debatir y poner sobre la mesa los problemas reales y sus posibles soluciones son muy importantes. Porque estamos asistiendo a hechos de gran impacto sobre la salud de la ciudadanía, desconocidos hasta el momento y que requieren, tras la experiencia sufrida, marcos específicos de actuación y planes concretos para atender desde la acción conjunta y solidaria de la profesión médica situaciones de emergencia nacional como la que venimos sufriendo desde hace año y medio.
Es muy importante que este IX Congreso Nacional y Encuentro Latinoamericano del PAIME tenga como eje central el impacto de la COVID-19 sobre la salud mental de los médicos bajo el lema: “La atención al médico enfermo desde las organizaciones colegiales en el contexto de la COVID-19" porque, como ya ha reflejado la OMC, nos va a permitir compartir y evaluar las consecuencias de la COVID sobre nuestro colectivo y sacar conclusiones que nos serán muy útiles de cara al futuro.
¿Qué nuevas líneas de trabajo debería desarrollarse para trabajar en la prevención de los problemas de salud mental de los profesionales?
El PAIME y la Fundación para la Protección Social de la OMC tienen un histórico y profundo arraigo en los Colegios desde que inició su andadura hace más de 20 años ejemplificando una labor comprometida de cuidar a los que cuidan. Y desde ese convencimiento, hay que ser capaces de generar los modelos y las herramientas necesarias para detectar, promover y afrontar los problemas de salud mental del colectivo médico en su conjunto, sobre todo en circunstancias de especial adversidad, como es la que estamos viviendo.